viernes, 30 de noviembre de 2012

Combates Dialécticos (6): Goering Vs Galland


- Hermann Goering: "¿Qué necesitan para conseguir acabar de una vez con esos malditos aviones ingleses?

- Adolf Galland: "Herr Reichsmarschall, quisiera unos cuantos Spitfires para mi escuadrón"

jueves, 29 de noviembre de 2012

Testimonios de la 2ª Guerra Mundial (30)


"Una vez, inspeccionando un avión ruso derribado por el fuego alemán, observamos que el aparato era muy simple; tenía lo estrictamente necesario para volar y carecía de la multitud de instrumentos que llenaban el tablero de los aviones alemanes. Preguntamos al aviador ruso: ¿Cómo es posible volar con estos medios tan arcaicos?. El piloto contestó: Nosotros calculamos que un avión ruso vuela, por término medio, siete veces antes de ser derribado...¿Para qué gastar tanto dinero por siete vuelos? ¿No es preferible construir el doble de aparatos primitivos que la mitad de aparatos perfectos?"
 
Oficial alemán del III SS-Panzerkorps


Fuente: "Las 100 mejores anécdotas de la Segunda Guerra Mundial" de Jesús Hernández

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Citas Célebres de la 2ª Guerra Mundial (56)



"Tenéis mi más sincera admiración por la exterminación de esos 11.000 idiotas de ojos rasgados"

William F. 'Bull' Halsey - Almirante de la Flota del Pacífico de los EEUU, dirigiéndose a los Marines estadounidenses tras la toma de Peleliu (noviembre 1944)

martes, 27 de noviembre de 2012

El Jardinero de Remagen

En marzo de 1945, las tropas aliadas habían llegado ya a las orillas del Rin. Para evitar que las vanguardias de los ejércitos americanos, británicos y franceses cruzasen el río, Hitler había dado orden de volar todos los puentes, una vez que los hubieran cruzado las tropas alemanas en retirada. El general Einsenhower y sus colaboradores en la planificación de la invasión de la Alemania occidental no albergaban ninguna esperanza de encontrar algún puente intacto. Sin embargo, el día 6 de marzo, el 27º Batallón de Infantería Blindada, perteneciente a la 9ª División Acorazada norteamericana, informó a su comandante, el brigadier general William M. Hoge, de que en la pequeña localidad alemana de Remagen, el puente de Ludendorff, construido para el ferrocarril durante la I Guerra Mundial, se encontraba milagrosamente intacto, tal y como pudo comprobarlo el propio Hoge desde una colina cercana, dando cuenta a sus superiores.


Entonces, el general Courtney H. Hodges - comandante del I Ejército de los EE.UU. - emitió órdenes urgentes para avanzar a toda velocidad sobre Remagen y capturar el puente a toda costa, antes de que los alemanes lo dinamitaran. Mientras, en el bando alemán reinaba la confusión. El comandante en la localidad germana, el teniente Willi Bratge, desconocía que aquella misma noche el mayor Johannes 'Hans' Scheller había recibido el mando de la zona, y tenía intención de mantener abierto el puente el mayor tiempo posible para permitir la retirada de las tropas alemanas que aún quedaban en la orilla occidental del Rin (incluyendo equipo pesado, como tanques y piezas de artillería). El teniente Bratge, en cambio, quería demolerlo cuanto antes para evitar su captura. El oficial responsable de preparar la voladura del puente, el capitán Friesenhahn, había solicitado 600 kilogramos de explosivos de demolición. En su lugar recibió aquella misma mañana 300 kilos de donarit, un explosivo de uso civil de relativa escasa potencia utilizado en la minería.


El 7 de marzo, un pelotón del 27º Batallón de Infantería Blindada, al mando del teniente John Grimball, avanzó junto a dos tanques M26 Pershing en veloz carrera hacia el puente Ludendorff. Al pasar por un grupo de casas a las afueras de Remagen, uno de los soldados vio a un anciano trabajando en un jardín. El soldado pensó que se trataba de un miembro del Volkssturm, la milicia nacional compuesta fundamentalmente por ancianos, niños y personas consideradas anteriormente no aptas para prestar servicio militar, que fue movilizada en los últimos días del Tercer Reich para defender Alemania (imagen sobre este párrafo), y que seguramente informaría a sus superiores de que los blindados norteamericanos se dirigían a tomar el puente. Así pues, le disparó tres veces con su fusil, pero el presunto miembro del Volkssturm se agachó a tiempo y esquivó las balas. Como la columna no podía detenerse, no hubo tiempo para realizar más disparos. 


Unos años más tarde, el teniente Grimball se enteró de la identidad de aquel jardinero. Era ni más ni menos que Konrad Adenauer (en la fotografía junto a Churchill en 1952), el que sería el primer  canciller de la Republica Federal de Alemania (RFA) en 1949 - a la edad de 73 años -,  convirtiéndose en el principal artífice de la recuperación económica del país (el llamado "milagro alemán") y que, además, paradójicamente, convertiría a su país en un fiel aliado de Estados Unidos.


Fuentes:
"Las 100 mejores anécdotas de la Segunda Guerra Mundial" de Jesús Hernández

lunes, 26 de noviembre de 2012

La Ascensión al Monte Elbrus

En el verano de 1942, el ejército alemán batallaba en el Frente Oriental con redoblados esfuerzos. Tras la derrota ante las puertas de Moscú en el invierno anterior, la Wehrmacht y sus aliados volvieron a golpear con dureza a las fuerzas del Ejército Rojo en un enorme frente que iba desde el mar Báltico hasta el Cáucaso.En este lugar, la cadena montañosa que da nombre a la raza caucásica, situada al sur de la antigua URSS, se libraron durísimos combates para asegurar los pasos de montaña que permitían a los germanos acceder a las rutas del mar Negro, en el marco de la llamada Operación Fall Blau. Desde ahí, y con la orografía bajo su control, dirigirse hacia los codiciados pozos petrolíferos de la zona no debía ser tarea ardua.


Este terreno fue uno de los más duros para combatir de toda la Segunda Guerra Mundial, con peligrosos combates en cotas superiores a 3.000 metros y desfiladeros con caídas al vacío de más de mil metros, todo ello en un macizo montañoso donde abunda el pórfido, un mineral de color rojizo que destaca por su dureza y resistencia, muy superior a la del granito. Tras los combates en este medio tan inhóspito, los cazadores de montaña alemanes lograron su propósito de asegurar desfiladeros como nombres tan exóticos como Klujor, Sancharo o Alustraju. Al final, consiguieron, tras arriesgadas escaramuzas entre peligrosos precipicios, conquistar el Paso de Bgalar, que conducía directamente a la costa del mar Negro, hacia Sujum.


El 21 de agosto de 1942, un equipo de 23 hombres de las 1.ª y 4.ª Divisiones de Montaña (Gebirgs-Division), conducido por los capitanes Heinz Groth y Max Gämmerler consiguieron alcanzar la cima del monte Elbrus, el pico más alto de Europa con 5.642 metros de altura sobre el nivel del mar. Sobre aquel paraje, los soldados germanos izaron la bandera de guerra del Tercer Reich y las respectivas banderas divisionales, tomando fotografías de la hazaña.Sin embargo, aquella acción distaba mucho de tener valor militar y fue una iniciativa de los propios soldados de montaña alemanes. Los combates por los pasos de montaña se libraban 2.000 metros más abajo, y el coronar la cima respondía más bien al espíritu aventurero de aquellos alpinistas.


Cuando la noticia llegó a Berlín, todo el mundo se felicitó por la conquista de los puntos estratégicos en el Cáucaso, sin embargo, Hitler montó en cólera cuando se enteró que sus cazadores de montaña se dedicaban al alpinismo en vez de a combatir contra las tropas de la Unión Soviética.No obstante, el Führer se vería obligado a cambiar de opinión a la luz de los acontecimientos posteriores. Joseph Goebbels, el astuto y siniestro Ministro de Propaganda nazi, supo ver de inmediato el valor propagandístico que podían tener las imágenes de la bandera del Tercer Reich ondeando triunfante en la cumbre del citado monte. Así pues, las fotografías de los sufridos cazadores de montaña en la cima del Elbrus fueron ampliamente difundidas por todos los periódicos y revistas del país como símbolo del entonces imparable avance de la Wehrmacht.

Hitler, encolerizado al principio con la acción de sus tropas alpinas, tuvo que cambiar de opinión al ver el entusiasmo y orgullo que, imágenes como ésta - o las que llegaban desde las arenas del desierto norteafricano con el Afrika Korps en ruta hacia El Cairo - provocaban en el pueblo alemán, que veía a sus soldados como imparables máquinas de conquistar que extendían el dominio del Tercer Reich por escenarios que hasta entonces sólo conocían por los libros y las películas de aventuras. Sin embargo, ese verano de 1942 sería el último en el que los alemanes podrían soñar con esta hazañas y con el final victorioso de la guerra; entres los meses de octubre y noviembre de 1942, las tropas de Montgomery derrotaban a las de Rommel en la batalla de El Alamein, comenzando el principio del fin del Afrika Korps. Meses después se decidió el destino de la guerra en una ciudad rusa a orillas del Volga: Stalingrado.


Fuentes:
"Las 100 mejores anécdotas de la Segunda Guerra Mundial" de Jesús Hernández

sábado, 24 de noviembre de 2012

Noticias sobre la 2ª Guerra Mundial (40)

Acabo de caer en la cuenta. Hace ya bastante días que no tenemos por aquí las tradicionales noticias relacionadas con la WW II. Tranquilos, lo remedio a la voz de ya. Aquí tenéis unas cuantas:

--- Los servicios secretos británicos han pedido ayuda a la ciudadanía para descifrar un código atado a los restos de una paloma mensajera de la Segunda Guerra Mundial que, tras semanas de estudio, continúa "indescifrable" para los expertos. El código fue descubierto en 1982 entre los restos de la chimenea de una casa en Surrey (sur de Inglaterra) por el dueño de la vivienda, que halló un pequeño escrito dentro de un tubo rojo atado a la pata de una paloma muerta.


En la pieza de papel, bajo el título "Pigeon Service", había escrito a mano hasta 27 códigos. Desde el descubrimiento, hace un mes, el Servicio de Escuchas y Decodificación de los Servicios Secretos británicos - Government Communication Headquarters (GCHQ) - ha estudiado sin éxito estos códigos, por lo que pide ayuda a la población para resolver un rompecabezas que les tiene "perplejos". Un historiador de este departamento dijo a la BBC que todo indica que el mensaje se realizó durante la Segunda Guerra Mundial, y ahí radica la complejidad para descifrarlo. "Ese tipo de códigos creados para ser usados en operaciones fueron diseñados para que sólo pudieran ser entendidos por los emisores y los receptores del contenido", explicó. Por este motivo, aseguró, a menos que tengan "una mayor idea de quién mandó el mensaje y a quién estaba dirigido" no averiguarán "qué se esconde tras los números". Los expertos barajan - además de esta opción de decodificación entre dos individuos, que haría al mensaje indescifrable - la posibilidad de que su contenido se base en un libro de señas utilizado en la época para una misión en concreto que ahora probablemente esté destruido. Entre las teorías sobre su cometido, algunos sugieren que fuera una prueba de mensajería de cara al  desembarco de Normandía.


Durante el conflicto bélico se utilizaron en el Reino Unido hasta 250.000 palomas mensajeras, cada una de ellas con un número de identificación único para cada mensaje que portaban. Sin embargo, en este documento se han encontrado hasta dos series de números - NURP.40.TW.194 y NURP.37.OK.76 - por lo que también se desconoce cuál de ellos corresponde a esta paloma.

--- En la búsqueda de Japón de nuevas fuentes de energía, un reflector de repuesto del legendario acorazado Yamato ha sido sacado de un depósito para cumplir un uso pacífico. El reflector circular, de 1,5 metros y valorado en más de 1,3 millones de dólares, se ha convertido en parte de un horno solar que convierte la luz del sol en calor en las instalaciones de la Universidad de Tohoku en la isla meridional de Kyushu"Me llena de emoción al pensar que podemos hacer uso del reflector unos 70 años después de la guerra. Estoy profundamente emocionado porque podemos convertir un arma en fuente de energía para uso pacífico." dijo un profesor de la universidad que encabezó el proyecto. Con el uso del horno solar, el proyecto pretende desarrollar un nuevo tipo de célula de combustible que explota las reacciones químicas de magnesio.


El acorazado Yamato, el orgullo de la Armada Imperial Japonesa, fue hundido por caza-bombarderos y torpederos norteamericanos embarcados en portaaviones, el 7 de abril de 1945, mientras estaba en ruta a Okinawa para luchar contra la invasión aliada de la isla, meses antes de la rendición del país. El buque de 65.027 toneladas y 263 metros de eslora, fue conocido como el más grande y más poderosamente armado acorazado jamás construido.

--- Una máquina encriptadora Enigma utilizada por el Ejército alemán durante la Segunda Guerra Mundial fue subastada recientemente en más de 85.250 libras esterlinas, superando ampliamente las estimaciones iniciales, que señalaban que podría alcanzar entre 40.000 y 60.000 libras. Construida por Heimsoeth und Rinke en 1941, la Enigma que fue vendida es una versión de tres rotores y es del tipo usada por Alemania entre 1938 y 1944. 



"Las máquinas Enigma muy raramente aparecen en subastas. Este caso en particular se debe a que se encuentra en estado totalmente intacto y sin modificaciones", dijo un responsable de la casa de subastas Bonhams. "Muchas máquinas fueron tomadas por los soldados aliados como recuerdos durante las etapas finales de la Segunda Guerra Mundial y como tal, en años posteriores, tendían a ‘mezclarse y combinarse’, al sustituir rotores, cajas y cabezales con piezas de otras máquinas. Esta Enigma tiene todos los elementos con el mismo número de serie, garantizando que está totalmente completa y original en todo". El código de la máquina Enigma fue descifrado por los criptoanalistas de Bletchley Park en el Reino Unido. "Pesos pesados" en matemáticas como Alan Turing rompieron los códigos, ayudando en última instancia a ganar la guerra contra el régimen nazi. 

viernes, 23 de noviembre de 2012

Citas Literarias (6)

"Stalingrado vive y vivirá. Imposible quebrantar la voluntad del pueblo que quiere ser libre. Destacamentos de obreros limpian las calles, las chimeneas de las fábricas humean y el cielo está cubierto de las redondas nubecillas de las explosiones de los proyectiles antiaéreos. La gente se ha acostumbrado enseguida a la guerra. Sobre las barcazas que efectúan el transporte de tropas vuelan sin cesar los cazas y bombarderos enemigos. Tabletean las ametralladoras, el fuego de los antiaéreos es incesante, y los marineros, contemplando el cielo, comen jugosas tajadas de sandía. Los muchachos, con las piernas colgando de la borda de las barcazas, observan con mirada atenta los corchos de sus cañas de pescar; una mujer ya entrada en años hace calceta sentada en un banquillo. Cada día marchan al frente nuevos destacamentos de obreros. Stalingrado ha formado las filas de las fortalezas proletarias del país: Tula, Leningrado, Moscú. Estas fortalezas son inexpugnables. Entramos en una casa medio destruida. Sus habitantes están comiendo en mesas hechas de tablas y cajones, los niños soplan en los platos de sopa caliente. Uno de los camaradas militares levanta del suelo un libro medio quemado: "Humillados y ofendidos", lee en alta voz, mira a las mujeres sentadas sobre unos fardos a su alrededor y suspira. Una joven, comprendiendo el hilo de sus pensamientos, se le acerca y dice enfadada: "Eso no tiene nada que ver con nosotros. ¡Hemos sido ofendidos, pero no humillados! ¡Nosotros nunca seremos humillados!".

Vasili Grossman "Años de Guerra" (1942: "Stalingrado"), pág. 253

jueves, 22 de noviembre de 2012

Testimonios de la 2ª Guerra Mundial (29)


"Sentí que un estremecimiento de excitación recorría mi espina dorsal. Nunca me he sentido tan orgulloso. Entraron, y nos quedamos horrorizados. Todos los hombres tenían barba de una semana. Sus uniformes estaban desgarrados y sucios, y de todos ellos emergían mugrientos vendajes empapados de sangre. Lo más terrible eran sus ojos..., enrojecidos, hundidos, mirando desde rostros tensos y cubiertos de barro, macilentos por la falta de sueño, y sin embargo, entraron con aire arrogante y altivo. Parecían lo bastante bravos como para apoderarse del lugar en aquel mismo instante."

Oficial de la 1ª División Aerotransportada británica convaleciente de sus heridas en el Hospital de St. Elizabeth (Oosterbeek), durante la Batalla de Arnhem (17-26 sept. 1944),  Operación Market-Garden.


Fuente: "Un Puente Lejano" de Cornelius Ryan

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Citas de Cómic (19)

Soldado Smith: "¿Ha oído lo de Lady Astor, señor?

Teniente Ross: "¿Lady Astor?"

Soldado Smith: "Se ve que habló en el Parlamento el otro día. Nos llamó los gallinas del Día D, señor. Dice que estamos tan tranquilos aquí, en Italia, que es en Francia donde se lucha de verdad".

Teniente Ross: "¡Pero eso es una aberración...! ¡Smith, no puede ser cierto!

Soldado Smith:
"Es lo que he oído, señor."


"War Story: Los Gallinas del Día D" de Garth Ennis y John Higgins

martes, 20 de noviembre de 2012

Combates Dialécticos (5): Lady Astor Vs Churchill


- Lady Nancy Astor"Milord, si usted fuera mi marido... le envenenaría el té".

- Winston Churchill: "Señora, si usted fuera mi esposa... ¡me lo bebería!"

lunes, 19 de noviembre de 2012

Citas Célebres de la 2ª Guerra Mundial (55)

"Lo que le ocurra a un ruso o a un checo no me interesa lo más mínimo (...) que las naciones vivan en prosperidad o mueran de hambre sólo me importa en la medida en que nosotros los necesitemos como esclavas de nuestra cultura; si no es así no me interesan en absoluto. Si 10.000 mujeres soviéticas caen agotadas al cavar una fosa antitanque, el hecho sólo me importa en cuanto la fosa antitanque ha sido terminada para uso de Alemania".

Heinrich Himmler - Reichsführer de las SS, París, octubre de 1943

domingo, 18 de noviembre de 2012

El Bombardeo de La Línea y el Incidente de Nador

Aunque, oficialmente, España se mantuvo neutral durante la Segunda Guerra Mundial - y ello pese a que el régimen franquista envió a la División Azul a combatir, junto a la Wehrmacht (y sus demás aliados), contra el Ejército Rojo -, ya os conté en su momento, que el territorio nacional sufrió una pequeña invasión en el valle pirenaico de Bujaruelo (Huesca). Pues bien, resulta que el espacio aéreo español también fue violado durante la contienda, tal y como os paso a relatar.


La madrugada del sábado 12 de julio de 1940, un bombardero italiano Savoia-Marchetti SM-82 (en la imagen sobre estas líneas) dejó caer por error 3 bombas sobre la La Línea de la Concepción, cuando pretendía lanzarlas sobre el aeropuerto de la colonia británica de Gibraltar. Dos de ellas quedaron medio enterradas en las dunas de la playa de Poniente (en la fotografía inferior una de las bombas recogidas en dicha playa), pero la tercera hizo blanco dentro del casco urbano de la localidad gaditana, en la esquina que forman las calles "Duque de Tetuán" y "López de Ayala", a la altura de los números 10 y 3 respectivamente según la numeración en vigor de entonces, afectando a tres viviendas que quedaron reducidas a escombros. Hubo numerosos heridos y murieron 5 vecinos del municipio, que tuvieron que ser desenterrados de los escombros con ayuda de luces de camiones militares, pues la explosión afectó al tendido eléctrico y dejó a la ciudad a oscuras. La onda expansiva se pudo sentir a cientos de metros de distancia.


Las autoridades españolas interpusieron una protesta ante los representantes de Mussolini, sin embargo, durante las madrugadas de los días 13, 14 y 15 de julio, el SM-82 reapareció en la bahía de Algeciras, siendo recibido con fuego antiaéreo, ante lo cual dejó caer nuevas bombas en la zona de Campamento. Esta vez dos de las bombas estallaron en las cercanías de las antiguas pistas de Polo, mientras que una tercera quedaba encajada en las arenosas riberas del "Rio Cachón". Al finalizar la contienda, el gobierno italiano pagó una indemnización de 250.000 dólares de la época por los daños causados a las personas y bienes de nacionalidad española durante toda la guerra, en los que se incluyó la lamentable falta de puntería demostrada por el bombardero del país transalpino. Esta cantidad serviría para amortizar parte de la deuda contraída por el régimen franquista ante Italia por su ayuda durante la Guerra Civil, haciéndose cargo el estado español del pago de las indemnizaciones, los gastos médicos y la restitución a los afectados de la pérdida de sus bienes. 


Sin embargo, ésta no fue la única huella de la Segunda Guerra Mundial dejada sobre el espacio aéreo español. En los meses posteriores a la invasión del Protectorado francés de Marruecos y la Argelia francesa por parte de los Aliados, en noviembre de 1942 ("Operación Torch"), fueron habituales las pequeñas escaramuzas con los aviones norteamericanos y británicos que sobrevolaban las posesiones españolas en África. El incidente más grave sobre espacio aéreo español se produjo el 3 de marzo de 1943 cuando una formación de 11 cazas norteamericanos Loockheed P-38 "Lightning" pasó sobrevolando Nador, localidad cercana a Melilla. Inmediatamente salió a su encuentro el teniente Miguel Entrena Klett (en la fotografía sobre este párrafo) a los mandos de un caza Heinkel He 112 (imagen inferior). Atacó a uno de ellos, logrando inutilizarle uno de sus dos motores, aunque el "Lightning" consiguió finalmente efectuar un aterrizaje forzoso cerca de la frontera con Argelia.  


Pese a la gravedad del hecho, no hubo consecuencias ni se produjeron represalias por parte de los norteamericanos. Los diplomáticos españoles se encargaron urgentemente de limar asperezas y a los pilotos se les ordenó que no volviesen a interceptar ningún aparato aliado. Al día siguiente otra formación de P-38 volvió a sobrevolar Nador. Pese al gesto desafiante de los estadounidenses, los aviones españoles se quedaron esta vez en tierra y los "Lightning" pudieron atravesar el espacio aéreo español tranquilamente sin ser atacados.

Fuentes:
"Las 100 mejores anécdotas de la Segunda Guerra Mundial" de Jesús Hernández
 http://es.wikipedia.org/wiki/Bombardeo_de_La_L%C3%ADnea_de_la_Concepci%C3%B3n
 http://www.andalucia.cc/adn/1197doc.htm

viernes, 16 de noviembre de 2012

Ratas y Murciélagos contra el Eje

No hace mucho os relataba por aquí, como el Ejército Rojo utilizó perros-bomba para atacar a los tanques alemanes. Pues bien, los soviéticos no fueron los únicos que trataron de utilizar animales cargados con explosivos contra los países del Eje. Os cuento.


Uno de los planes más estrafalarios desarrollados por el SOE (Special Operations Executive) británico era el de las ratas bomba. El invento consistía en coger una rata muerta, vaciarla y ocupar el espacio con explosivos plásticos para luego coserla (vamos, más o menos, algo parecido a rellenar un pavo). Una vez preparada, la idea era enviarlas a Alemania y dejarlas en las pilas de leña y carbón, junto a las calderas para que cuando se descubrieran y se lanzaran al fuego explotaran, causando además del daño físico, un daño psicológico en todo el país. El plan se puso en marcha y un agente del SOE se hizo pasar por un estudiante y compró un centenar de roedores con la excusa de hacer experimentos de laboratorio. Finalmente, se envió un contenedor con los animales preparados, pero fue descubierto por los alemanes, echando al traste la singular operación. Aunque no produjo el efecto deseado en un principio, el SOE redactó un informe en el que reconocía que el descubrimiento tuvo un “extraordinario efecto moral”: los roedores fueron expuestos en todas las escuelas militares alemanas, lo que provocó una búsqueda de “cientos de ratas que se creía fueron distribuidos en el continente europeo”.


Sus homónimos norteamericanos, la OSS (Office of Strategic Services) - precursora de la actual CIA - no les andaron a la zaga y también desarrollaron planes de lo más insólito para tratar de decantar el curso de la guerra del bando aliado. Uno de esos disparatados proyectos fue el atacar ciudades japonesas con un un millón de murciélagos que llevarían bombas incendiarias adosadas a su cuerpo. El doctor Lytle S. Adams, un dentista de Pensilvania e inventor aficionado, fue quien tuvo esa original idea. Había 4 razones por las que Adams creía que su extraordinaria idea podía funcionar: 1) los murciélagos llevan a sus crías, a veces a 2 o 3, por lo cual tienen la fuerza suficiente para transportar una bomba pequeña, 2) se les puede inducir a la hibernación, por lo que son relativamente fáciles de manejar, 3) durante el día buscan la oscuridad, tejados y áticos, grietas y orificios para refugiarse, y 4) los había por millones, disponibles en cuevas y grutas por todo el país.


Aunque las teorías del Dr. Adams eran sólidas, para llevarlas a la práctica debía convencer al Gobierno para conseguir medios y personal para poder desarrollar el proyecto. No era tarea fácil para un dentista sin ninguna experiencia militar. Lo que necesitaba era un contacto en las altas esferas. Por suerte, "Doc" Adams era un buen amigo de la primera dama, Eleanor Roosevelt. El 12 de enero de 1942 el dentista trasladó sus ideas a papel y las llevó a la Casa Blanca. El presidente las encontró interesantes y solicitó a los líderes militares que las estudiaran. Estos, aunque escépticos, estaban desesperados por devolver el golpe a los japoneses y vieron que la idea tenía posibilidades. Los edificios japoneses construidos con materiales como bambú, madera y papel, arderían con facilidad, por lo que si se soltaran sobre Japón un millón de murciélagos con bombas incendiarias, los resultados podían ser devastadores. El plan de alto secreto, cuyo nombre en clave era "Proyecto Rayos X" recibió con cautela la luz verde.


El general 'Hap' Arnold pidió al Dr. Adams que pusiera el plan en marcha. El dentista e inventor formó un equipo de ayudantes, y se trasladaron a las cuevas de Texas y Nuevo México. Debían averiguar exactamente que podían hacer los murciélagos y como manipularlos, así como que especie era la más idónea para llevar una bomba. Había millones de murciélagos en cada cueva, todos ellos distintos en forma y tamaño. Sin embargo, había uno que se podía considerar en serio para el proyecto: el cola libre mexicano. No era especialmente grande, pero lo había por millones. Capturar a los murciélagos necesarios era fácil, así como inducirles a la hibernación enfriando la temperatura del aire. Pero construir un artefacto incendiario que los animales pudieran transportar era mucho más complicado.


El murciélago mexicano medio pesaba apenas 15 gramos. Las pruebas demostraron que sólo podía llevar más de una vez su propio peso, y los dispositivos incendiarios más pequeños disponibles en la época pesaban 900 gramos, es decir, 30 veces más de lo el murciélago podía transportar. Así pues, se encomendó el proyecto a uno de los científicos más importantes del pais: Louis Frederick Fieser (en la fotografía bajo este párrafo), un reputado químico, profesor e inventor de la Universidad de Harvad. Su tarea consistía en diseñar un artefacto lo bastante pequeño para que lo llevase el murciélago, pero con la potencia suficiente para incendiar un edificio. Su idea fue usar un invento suyo, el napalm, una gasolina gelatinosa (en realidad una mezcla de gasolina y jabón líquido), que era compacta y relativamente ligera, fiable y que cuando prendía ardía con mucha fuerza. Además, cuando se calentaba, se convertía en líquida y podía meterse por las grietas de los tejados, cruzar compartimentos, etc., por lo que para el murciélago era el explosivo perfecto.


Para llevar el napalm Fieser desarrolló una pequeña cápsula de celuloide, que incluía una espoleta de tiempo retardado, pero lo más increíble es que aún pesaba menos de 30 gramos. La bomba se implantaba por medio de un clip insertado quirúrgicamente en el pecho del animal, de modo que quedada suspendida debajo de él. Esa pequeña bomba era tan efectiva que se podía colocar sobre una plancha sólida de, por ejemplo, 3x3 metros de madera y prendía sin tener que avivar el fuego. Su efectividad se puso de manifiesto durante unas pruebas en la base aérea de Carlsbad  en Nuevo México. Algunos murciélagos escaparon con bombas activadas y en cuestión de minutos, varias instalaciones de la base estaban en llamas (imagen inferior). Sin embargo, la pregunta más importante seguía sin respuesta: ¿cómo dejar caer un millón de murciélagos sobre una ciudad japonesa?


Para mantener la seguridad, los murciélagos debían quedar en estado de hibernación mientras llevaban las bombas y durante el viaje hacia el objetivo. Los murciélagos dormidos no podían lanzarse sin más desde un avión porque se estrellarían contra el suelo. Para soltarlos de forma efectiva, habría que dejarlos salir de hibernación y hacerles partir desde una plataforma segura desde la cual volar y refugiarse en un edificio. A Lytle S. Adams se le ocurrió diseñar una ingeniosa "bomba-murciélago" (bat bomb): se colocaban 1.040 murciélagos, apilados sobre 26 bandejas, en un contenedor de 1,5 metros en forma de bomba (fotografía de aquí abajo). En cada bandeja había 40 compartimentos separados, uno para cada murciélago. La bomba se lanzaría desde unos 1.500 metros de altura con el descenso cuidadosamente controlado. Un paracaídas se abriría a 600 metros, simultáneamente caería la carcasa exterior de la bomba, las bandejas se abrirían como un acordeón, cada una unidad a la siguiente por medio de una cuerda. Los murciélagos caían sobre la bandeja inferior y entonces las bandejas flotaban lentamente hasta el suelo, dando tiempo a los animales para despertar. Al salir volando cada animal liberaba un cable del grosor de un cabello que conectaba la bomba a la bandeja. Entonces la bomba incendiaria estaba lista para detonar transcurridos 30 minutos.


El 15 de diciembre de 1943, la "bomba-murciélago" se probó en un campo de pruebas en el desierto de Utah. Se construyó una aldea al estilo japonés para ver si los murciélagos se refugiaban en los tejados y áticos de las casas como se esperaba. Los murciélagos se portaron a la perfección. Los militares quedaron impresionados y concluyeron que era un arma efectiva, lo que llevó a la aprobación de la "bomba-murciélago". Debía ponerse en acción contra los japoneses en septiembre del año siguiente, pero sin embargo, el 16 de febrero de 1944 se canceló el proyecto de forma inesperada, y sin que se diera a sus responsables ninguna explicación. Lo cierto es que, los norteamericanos ya habían encontrado un método rápido y definitivo de acabar la guerra. La bomba atómica convirtió la "bat bomb" en obsoleta antes siquiera de entrar en acción.

Fuentes:
http://historiassegundaguerramundial.wordpress.com/2012/10/16/las-ratas-bomba-del-soe/
 http://curistoria.blogspot.com.es/2012/05/murcielagos-bomba-el-terror-venia-del.html

jueves, 15 de noviembre de 2012

Coreanos en Normandía

Cuando la Wehrmacht invadió la URSS ("Operación Barbarroja"), se enorgullecía de su "pureza racial". Sin embargo, pronto se encontró con la imperiosa necesidad de incorporar tropas de reemplazo, debido al gran número de bajas y al enorme territorio que tenía que conquistar, ocupar y controlar, lo que hizo que los alemanes abandonaran radicalmente esa clase de conceptos. Inicialmente, los denominados Volksdeutsche (alemanes raciales o étnicos) de Polonia y los de los Balcanes fueron forzados a presentarse "voluntarios". Su clasificación exacta era la de Abteilung 3 der Deutschen Volkklits (Sección 3 de la lista de la raza alemana); significaba que a las personas así clasificadas se les concedía la ciudadanía alemana por un período de 10 años, siendo susceptibles de ser llamados a filas aunque sin poder ascender en el escalafón de mando. 


Entre 1942 y 1943, se llevó a cabo un agresivo reclutamiento en los territorios ocupados de la Unión Soviética para la lucha contra el comunismo: las llamada Ostlegionen (también conocidas como Osttruppen y Ostbataillonen); cabe decir a este respecto que la validez de los reclutas que se presentaron voluntarios, al principio era bastante fiable, ya que los hombres procedentes de las repúblicas occidentales del imperio soviético suscribían la lucha contra el régimen de Stalin. Al iniciarse la retirada alemana, el número de voluntarios (Freiwilligen) decreció ostensiblemente a favor de la presencia de auxiliares (Hilfswilligen, comunmente conocidos como Hiwis) procedentes de los territorios ocupados y de los enormes contingentes de prisioneros de guerra capturados al Ejército Rojo. A principios de 1944, la Wehrmacht tenía "voluntarios" de Croacia, Hungría, Rumanía, Polonia, Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, la Rusia Asiática, Rusia, Ucrania, Rutenia, las repúblicas musulmanas de la URSS, así como Cosacos del Volga, Tártaros de Crimea e incluso indios. Los llamados Ostbattalionen (o “Batallones del Este”), perdieron eficacia a marchas forzadas después de la derrota alemana en la crucial Batalla de Kursk. Posteriormente, fueron enviados a Francia para sustituir a las necesarias tropas alemanas allí destacadas.


En la playa Utah, el día del Desembarco de Normandía, el teniente Robert Brewer del 506º Regimiento de Infantería Paracaidista de la 101ª División Aerotransportada norteamericana, capturó cuatro asiáticos que vestían el uniforme de la Wehrmacht. Nadie comprendía su idioma ni sabía que diablos hacían allí. Finalmente se supo que eran coreanos. Nada más y nada menos. Pero ¿cómo era posible que soldados coreanos estuvieran peleando en Francia, en la otra punta del planeta, en el bando de Hitler para defender las costas normandas de la invasión aliada? Cuenta Stephen E. Ambrose en su libro  "El Día D" que lo más probable es que hubieran sido reclutados forzosamente en el ejército  japonés en 1938 - Corea era entonces una colonia japonesa -, después capturados por el Ejército Rojo durante las guerras fronterizas contra Japón en 1939, y forzados a entrar al ejército ruso. Capturados después por la Wehrmacht en diciembre de 1941, en las afueras de Moscú, su periplo terminó en Francia, donde se les encomendó la defensa de la Muralla Atlántica.  


No andaba nada desencaminado Ambrose. El soldado de la fotografía de aquí arriba es Yang Kyoungjong, nacido en Shin Wuijoo, en el norte de Corea, el 3 de marzo de 1920. Como he dicho antes, Corea era entonces una colonia japonesa - y Yang, como muchos otros jóvenes coreanos fue reclutado a la fuerza por el ejército japonés, el Kwantung, en 1938 y enviado a Manchuria. Durante la Batalla de Khalkin Gol, la poco conocida (pero fundamental) batalla entre los japoneses y los soviéticos en Mongolia en 1939, fue capturado por el Ejército Rojo y enviado a un gulag. No obstante, no pasó mucho tiempo hasta que se vio involucrado en otra guerra, cuando los alemanes invadieron la URSS en 1941 y el ejército soviético, necesitado de tropas, lo reclutó forzosamente junto a otros miles de prisioneros, enviándolo a luchar contra los alemanes. En 1943 fue capturado de nuevo, esta vez por los alemanes en Ucrania durante la 3ª Batalla de Jarkov, y pasó a formar parte de las Osttruppen de la Wehrmacht que fueron destinados en Francia, en la península de Cotentin, para defender las costas francesas de las fuerzas aliadas de invasión. Su última derrota la vivió, vistiendo un uniforme alemán, cuando fue hecho prisionero por los americanos en Utah Beach, el 6 de junio de 1944. Después de pasar un tiempo en un campo de prisioneros en Gran Bretaña, emigró hacia los Estados Unidos, estableciéndose en Illinois, donde vivió el resto de su vida. Murió en 1992.

Por cierto, hay una película coreana, "My Way" (2012) que cuenta la historia de Yang Kyoungjong. No he tenido la oportunidad de verla, pero para el que pudiera interesarle, aquí tiene el trailer:



Fuentes:
"El Día D" de Stephen E. Ambrose
http://en.wikipedia.org/wiki/Yang_Kyoungjong
http://www.dailymail.co.uk/news/article-2153688/Second-World-War--German-Japanese-soldier-stories-change-perception-ever.html

martes, 13 de noviembre de 2012

El Operario Infeliz

El Tercer Reich utilizó como mano de obra para la agricultura, la minería, la construcción o la industria armamentística y otras industrias estratégicas a miles de trabajadores forzados provenientes de los países ocupados (fundamentalmente de los países del Este), así como judíos deportados, prisioneros de guerra, disidentes y desertores.


Así por ejemplo, la llamada Organización Todt,  dependiente de la Wehrmacht y del Ministerio de Armamento nazi y que estaba dedicada a la ingeniería y construcción de infraestructuras tanto civiles como militares a lo largo de toda Alemania y las zonas ocupadas, fue responsable de la esclavitud de más de 1,5 millones de personas para el desarrollo de sus operaciones. Su fuerza e influencia llegó a ser enorme, tal que en 1944 se estima que entre el 25 y el 30% de la producción bélica alemana provenía de fábricas administradas por la organización.


No obstante, y pese a los evidentes beneficios para la Alemania nazi, la utilización de trabajadores forzados en las cadenas de montaje de la industria armamentística, también ofrecía muchas oportunidades de poder realizar sabotajes. Uno de esos sabotajes se produjo en un avión Messerschmitt Me 163 "Komet", un caza alemán de revolucionario diseño propulsado por cohete (en realidad, podría considerarse como un planeador, que usaba su revolucionario medio de propulsión sólo durante unos minutos durante el despegue y el ascenso a gran altura).


Pese a alcanzar los 1.000 km/h y poseer un pesado armamento compuesto por cañones de 30 mm, el Me 163 resultó ser inefectivo debido a la poca duración de su combustible (unos 7 minutos), las dificultades de su producción en serie y a que su manejo era muy peligroso (sobre todo por la tendencia de su motor a hacer explosión en los aterrizajes accidentados, que eran muchos). La guerra terminó antes de que pudiese afectar al curso de la guerra, aunque ciertos expertos opinan que, de haberse puesto en servicio un año antes, podría haber cambiado drásticamente el resultado de la batalla aérea en los cielos alemanes. Otros expertos, sin embargo, consideran que  fue una de las jugadas más desafortunadas de la industria aeronáutica alemana durante la contienda, pues en su desarrollo se dilapidaron esfuerzos necesarios para propuestas más convencionales, y además el aparato resultaba más peligroso para sus propios pilotos que para el enemigo. Solamente fueron fabricados unos 300 ejemplares durante la guerra, que tan sólo lograron derribar 9 aviones aliados.


Pues bien, volviendo al tema que nos ocupaba, os decía que uno de esos sabotajes cometidos por trabajadores forzados se produjo en uno de esos "Komet". En el año 1945, los aliados capturaron uno de estos aparatos y fue enviado a EEUU donde se realizó una inspección a fondo del modelo. Durante el examen del caza, se encontró una pieza de acero preparada para perforar el depósito de combustible en el momento del despegue. En dicha pieza, apareció grabado en francés la siguiente frase: "No soy feliz en mi trabajo".
 
Fuentes:
http://historiassegundaguerramundial.wordpress.com/2012/09/25/infeliz-con-el-messerschmitt/
 http://es.wikipedia.org/wiki/Messerschmitt_Me_163
http://es.wikipedia.org/wiki/Organizaci%C3%B3n_Todt

lunes, 12 de noviembre de 2012

Testimonios de la 2ª Guerra Mundial (28)


"Estábamos de maniobras con un grupo de tanques Valentine en una zona boscosa y  nuestra misión era tenderles una emboscada. Al ser un poco dementes como todos los zapadores, decidimos hacer las cosas más interesantes colocando una pequeña cantidad de explosivo amatol en unas botellas de leche con un detonador y una mecha de seguridad de entre 5 y 10 segundos de demora; cuando aparecieron los Valentine, arrojamos las botellas de leche en su dirección.

A los 30 segundos había 3 tanques fuera de acción, uno con una oruga rota, otro al que la explosión de una pequeña carga en la escotilla del motor le había dejado fuera de combate y el último al que le había explotado una botella por debajo y simplemente se negaba a seguir funcionando. Esas cargas no eran nada comparadas con un proyectil antitanque normal. De cualquier modo, a partir de entonces, los zapadores no gozamos de gran popularidad en aquel regimiento de tanques. Pero si una mera broma durante un ejercicio les podía ocasionar tanto daño, ¿cómo responderían en la acción de verdad? Sólo tuvimos una baja, un trozo de botella en el culo de uno de mis zapadores, por tanto, al menos aprendieron a mantenerse agachados."

Sargento de los Royal Engineers (8º Ejército Británico) durante los inicios de la campaña del Norte de África


Fuente: "El Octavo Ejército" de Robin Neillands 

viernes, 9 de noviembre de 2012

Citas Célebres de la 2ª Guerra Mundial (54)

"¡Camisas Negras! ¡Italianos e italianas! Después de un largo silencio, he aquí que nuevamente os llega mi voz y estoy seguro de que la reconoceréis. Es la voz que os ha convocado en los momentos difíciles y que ha celebrado con vosotros las jornadas triunfales de la patria."

Benito Mussolini - Parte inicial del largo discurso emitido por radio el 18 de septiembre de 1943, días después de ser liberado por paracaidistas alemanes del hotel en el macizo del Gran Sasso (Montes Apeninos) donde permanecía arrestado.

jueves, 8 de noviembre de 2012

Carteles Propagandísticos de la Segunda Guerra Mundial (12)

Seguimos una nueva tanda de carteles propagandísticos de la WW II, y lo hacemos, de nuevo, con una serie de posters norteamericanos centrados en su guerra contra los japoneses. Allá van: