Mientras recopilaba información para este post sobre la campaña de la Ruta de Kokoda supe de la existencia de este film australiano basado en esta batalla de la Segunda Guerra Mundial apenas conocida, y me picó la curiosidad ver esta cinta dirigida por un tal Alister Grierson.
Pongámonos un poco en el contexto de la película. Corre el año 1942, los japoneses se encuentran en el norte de Nueva guinea y amenazan con invadir Australia, situada al sur de dicha isla. Para ello, los nipones deben capturar la vital base naval de Port Moresby cruzando la isla de norte a sur por la única ruta terrestre existente y "practicable": la pista de Kokoda, una inhóspita y escarpada senda en medio de la jungla que atraviesa la imponente cadena montañosa Owen Stanley.
Dicho sendero será objeto de duros y penosos combates entre los japoneses y un par batallones de inexpertos reclutas de la Milicia Australiana (llamados despectivamente por los soldados del AIF (2nd Australian Imperial Force) "chocos", por considerar que no eran más que soldados de chocolate que se derretirían al instante en el fragor de la batalla). Los hermanos Jack (Jack Finsterer) y Max (Simon Stone) Sholt son dos de los componentes de una patrulla del 39º Batallón de la Milicia Australiana destinado en Kokoda, que tras un primer encuentro con los japoneses, sufre importantes pérdidas de efectivos y ve superadas sus posiciones, viéndose obligados sus supervivientes a emprender una penosa y peligrosa huida a lo largo de la espesa e inhóspita jungla, tratando de regresar a sus líneas y evitar a las patrullas niponas.
Dicho sendero será objeto de duros y penosos combates entre los japoneses y un par batallones de inexpertos reclutas de la Milicia Australiana (llamados despectivamente por los soldados del AIF (2nd Australian Imperial Force) "chocos", por considerar que no eran más que soldados de chocolate que se derretirían al instante en el fragor de la batalla). Los hermanos Jack (Jack Finsterer) y Max (Simon Stone) Sholt son dos de los componentes de una patrulla del 39º Batallón de la Milicia Australiana destinado en Kokoda, que tras un primer encuentro con los japoneses, sufre importantes pérdidas de efectivos y ve superadas sus posiciones, viéndose obligados sus supervivientes a emprender una penosa y peligrosa huida a lo largo de la espesa e inhóspita jungla, tratando de regresar a sus líneas y evitar a las patrullas niponas.
Es evidente que la película pretende ser algo así como el "Gallipoli" (1981) de la Segunda Guerra Mundial - o incluso un "Salvar al Soldado Ryan" (1998) en versión australiana -, pero lo cierto es que no le llega al film del gran Peter Weir ni a la suela de los zapatos (ni mucho menos a la película de Spielberg, por cierto). "Kokoda" es una película que se deja ver sin más, es entretenida a ratos, aburrida a otros, pero que a duras penas llega al aprobado. Ciertamente, se agradece la intención de sus responsables de rendir un homenaje a los sufridos soldados australianos que lucharon en una de las batallas mas duras y a la vez desconocidas de la Segunda Guerra Mundial, pero el resultado final es bastante discreto para una historia que pienso ofrecías muchas posibilidades y a la que tanto, director como guionistas, podían haberle sacado mucho más jugo.
Uno de los aciertos de la película es el plano visual: la fotografía capta a la perfección los distintos matices y colores, luces y sombras de los escenarios selváticos. Además, la ambientación, resulta bastante lograda y ajustada a las condiciones reales de la batalla, mostrando las armas y equipamiento reales - como los fusiles Lee Enfield o la ametralladora ligera Bren, como la que maneja el duro y adusto Darko (Travis McMahon) - y reflejando a la perfección las duras condiciones imperantes en la selva de Kokoda: las copiosas lluvias, el intenso calor y la humedad, el espeso barro, lo escarpado e impracticable de la senda, el extremo cansancio, las enfermedades (como la disentería o las enfermedades cutáneas, hongos y ulceraciones generalizadas), así como la crueldad y brutalidad de los japoneses con los prisioneros.
Otro aspecto que me gustó fue el modo en que se muestra a los soldados nipones. Apenas se les ve, son figuras emboscadas, sin rostro, camufladas, acechantes (a veces, incluso solo aparecen en cámara sus pies o sus cascos cubiertos de hojas y ramas, partes de sus cuerpos, equipación o sus armas) lo que les de un aire tenebroso y amenazante, pero también claramente deshumanizador. No sé, me recordó un poco, salvando las distancias, al modo en que Oliver Stone mostraba a los vietnamitas en la excelsa "Platoon" (1986). Ello unido a la espesura de la jungla, a sus inquietantes sonidos, al amenazador entorno en que se mueven los sufridos y exhaustos soldados australianos, crea un innegable clima de tensión y suspense, pues en cualquier momento puede acechar el peligro para los protagonistas.
Otro aspecto que me gustó fue el modo en que se muestra a los soldados nipones. Apenas se les ve, son figuras emboscadas, sin rostro, camufladas, acechantes (a veces, incluso solo aparecen en cámara sus pies o sus cascos cubiertos de hojas y ramas, partes de sus cuerpos, equipación o sus armas) lo que les de un aire tenebroso y amenazante, pero también claramente deshumanizador. No sé, me recordó un poco, salvando las distancias, al modo en que Oliver Stone mostraba a los vietnamitas en la excelsa "Platoon" (1986). Ello unido a la espesura de la jungla, a sus inquietantes sonidos, al amenazador entorno en que se mueven los sufridos y exhaustos soldados australianos, crea un innegable clima de tensión y suspense, pues en cualquier momento puede acechar el peligro para los protagonistas.
Pero el principal problema de "Kokoda" (imagino que por cuestiones de presupuesto) es que apenas muestra escenas de combates y cuando las vemos, no pasan de pequeños enfrentamientos, a lo sumo escaramuzas, que además suceden en un pis-pas y prácticamente no te enteras qué o cómo han ocurrido. La batalla final, a mayor escala, tampoco es gran cosa y está rodada sin mucho despliegue de medios, lo que tampoco hace que la película remonte excesivamente el vuelo. El film concluye de manera bastante convencional con el típico discurso épico alabando el valor de los soldados australianos, los padecimientos sufridos y la importancia de la victoria obtenida sobre las fuerzas japonesas.
En definitiva, y como digo, aunque se agradece que se haga esta aproximación cinematgráfica a un episodio semidesconocido de la Segunda Guerra Mundial, a través del cual nos hacemos una idea de lo canutas que las pasaron los australianos en Kokoda, lo cierto es que la película no es nada del otro mundo. Una pena, porque como digo, bien llevada, la historia podía haber dado mucho más juego.
Coñe furi!!!!!!! No he leído el post, mañana lo hago, pero enhorabuena, ese Zaragoza de primera!!!
ResponderEliminar1besico!
Pues si a ti que eres un fanático de la II Guerra Mundial no te ha terminado de gustar, creo que paso de verla...la que tengo ya en el ordenador esperando para verla es la de Red Tails!!! Ya te contaré que tal.
ResponderEliminar1besico!
Ale Zaragoza, ale, ale!!! Remontada épica de 12 puntos para salvar la permanencia que en el mes de febrero todos dábamos por imposible. Pero ya lo dijo Galdós "...entre los escombros y entre los muertos habrá siempre una lengua viva para decir que Zaragoza no se rinde." Eso sí, son ya dos años seguidos, salvando los muebles en el último partido y esto no puede seguir así. Agapito vete ya!!!
ResponderEliminarPor cierto, confieso que estuve a punto de hacérmelo encima en la oportunidad de Güiza. Menos mal que quiso emular a Sergio Ramos y puso el balón en órbita (aun con todo, con la derrota del Villareal, estabamos salvados con un empate).
La peli, si no eres fanática del género y de la WW II, no pierdas el tiempo. "Red Tails", ya me dirás, pero me parece a mi que será una castaña...
Furi, ya he visto la de Red Tails y como le he dicho a Lombri, es un Top Gun donde los protas son negros y se trata el tema del racismo...pero vamos, más allá de eso...tampoco es nada del otro mundo. A Tripi seguro que le encanta, jajajja.
ResponderEliminar1besico!
Ya me imaginaba yo que no sería para tirar cohetes. En fin, con que entretenga lo mínimo me conformo. A ver si tengo tiempo y le puedo echar un vistazo. Gracias, guapa!!
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