miércoles, 23 de enero de 2013

Los Comandos "Brandenburg"

El origen de esta unidad alemana de comandos de élite debemos buscarlo en las ideas de Theodor von Hippel, un especialista en operaciones especiales durante la Primera Guerra Mundial, quien durante dicho conflicto acumuló una gran experiencia en la realización de ataques sorpresa tras las líneas enemigas, particularmente en Sudáfrica Oriental. Von Hippel (en la fotografía de aquí abajo) había estudiado profundamente las tácticas de guerrilla de T. H. Lawrence, que consistían atacar y escapar rápidamente. Tras la Gran Guerra, von Hippel ingresó en los servicios de inteligencia alemanes y presentó a sus superiores una serie de innovadoras ideas y tácticas, entre ellas, la formación de una unidad de élite entrenada especialmente para adentrarse en territorio enemigo antes de una ofensiva para asegurar objetivos estratégicos; sin embargo, sus proyectos no fueron tenidos en cuenta. La idea colisionaba con el protocolario sentido prusiano del honor. Tales unidades, creían la mayoría, serían una infracción de las reglas de la guerra y, además, tales saboteadores no serían dignos de ser llamados soldados.


Con la creación del Abwehr, el servicio de inteligencia militar de la Alemania nazi bajo el mando del almirante Wilhelm Canaris, las ideas de von Hippel fueron recibidas con los brazos abiertos y se le autorizó a formar un grupo de "soldados especiales" al cual debía entrenar de manera acorde a las operaciones que  proponía (sabotaje, captura de puentes y cruces carreteras, aseguramiento de objetivos estratégicos, demolición y eliminación selectiva de personas). Von Hippel rastreó las fronteras de Alemania para encontrar individuos de origen alemán (volkedeustche), eslavos u otros grupos étnicos. Cada miembro de la unidad tenía que hablar con fluidez una lengua extranjera, ya sea checo, ruso, letón, lituano, finés, estonio, polaco, ucraniano o rutenio, y tenían que conocer bien las costumbres del país o región donde se infiltrarían y los hábitos locales y comportamientos de los nativos.


En octubre de 1939, se dio a la unidad el inocente nombre de Bau-Lehr-Kompanie 800 (800ª Compañía de Demostración de Construcciones). En enero de 1940 fue reestructurada como Bau-Lehr-Bataillon zbV 800 (Batallón 800 de Demostración de Construcciones para Aplicaciones Especiales). El batallón estaba formado por 4 compañías, un pelotón de motocicletas, otro paracaidista y otros pelotones especializados. Dado que tenían su cuartel general en Branderburgo, la unidad fue conocida como "Brandenburg" y sus efectivos recibieron el apelativo de "brandenburgers".


Los "Branderburgers" tuvieron una intervención destacada en la campaña del oeste. Así por ejemplo, dos noche antes de la invasión de Bélgica y Holanda, el 8 de mayo, vistiendo uniformes holandeses, cruzaron secretamente la frontera. Uno de sus objetivos era el puente sobre el río Mosa en la ciudad de Gennep (Holanda). A las 2:00 horas del 10 de mayo, el teniente Wilhelm Walther dirigió a su destacamento de 8 hombres en un intento de capturar el puente intacto tras obtener información sobre donde habían sido situadas las cargas de demolición. Disfrazados como policías militares holandeses escoltando a varios "prisioneros alemanes", los "Brandenburgers" sorprendieron a los defensores del puente. Dos puestos de guardia fueron inmediatamente destruidos, pero tres hombres fueron heridos, y los puestos al otro lado del puente aún no estaban bajo control alemán. Vestido con un uniforme holandés, Walther avanzó atrevidamente, y los defensores vacilaron. Sacando provecho de este error, el resto de los comandos destruyeron los puestos de guardia restantes y cogieron el detonador conforme los primeros panzer rodaron por el puente.


Los comandos "Brandenburg" (en la foto, vistiendo uniformes belgas) combatieron en prácticamente todas las campañas de todos los frentes. En el batallón estaban representadas muy diversas capacidades y habilidades lingüísticas, y se pretendía utilizar a los miembros de la unidad angloparlantes, con uniforme británico, como avanzada de la fuera de invasión si se llevaba a cabo la "Operación León Marino". Cuando Hitler volvió su atención al sur, hacia los Balcanes, durante la "Operación Marita", de nuevo, los "brandenburgers" –ahora organizados como un regimiento- abrieron el camino a sus ejércitos. El 5 de abril de 1941, un día antes de la invasión de Grecia y Yugoslavia, un destacamento de 54 hombres aseguraron los muelles en Orsova, en el río Danubio. Otra unidad capturó el puente sobre el río Vardar en Grecia, cerca a Salónica durante la ofensiva alemana. También estuvieron en Atenas antes que llegaran las fuerzas alemanas, procediendo luego a izar la bandera con la esvástica sobre la Acrópolis.


Después de la invasión de la URSS en junio de 1941, miembros de la unidad disfrazados con uniformes soviéticos (en las imágenes de aquí arriba) se infiltraron en las columnas de heridos enemigos que se retiraban del frente para poder moverse libremente por la retaguardia enemiga y tomar el vital puente sobre el Daugawa en Dünaburg (Daugavpils, Letonia). El regimiento rara vez operaba como una unidad, pues su particular naturaleza obligaba a destacar sus elementos para realizar operaciones especiales en varios frentes. A comienzos de agosto de 1941, un destacamento  de 62 bálticos y sudetes alemanes dirigido por el barón Adrian von Fölkersam (en la fotografía bajo este párrafo) penetró más lejos en territorio enemigo que ninguna otra unidad Brandenburgo,  con el fin de capturar y asegurar los campos petrolíferos de Maikop. Utilizando camiones del Ejército Rojo y los uniformes del NKVD, Fölkersam se infiltró en las líneas soviéticas. Inmediatamente se toparon con un gran grupo de desertores soviéticos, y Fölkersam vio una oportunidad para utilizarlos. Persuadiéndolos de retornar a la causa soviética, fue capaz de unirse a ellos y moverse casi a voluntad a través de las líneas rusas hasta llegar a Maikop.


Una vez allí, haciéndose pasar por el mayor Truchin de la NKVD, se entrevistó con el comandante del puesto y lo convenció para que lo guiara en un recorrido para inspeccionar las defensas de la ciudad. Este, muy contento por complacer a un alto oficial de la NKVD aceptó de buen grado, discutiendo incluso las ventajas y desventajas de los sistemas de defensa. El 8 de agosto, la Wehrmacht estaba sólo a 20 kms, por lo que los "brandenburgers" hicieron su jugada. Usando granadas para simular un ataque de artillería, destruyeron el centro de comunicaciones de la ciudad. Fölkersam fue a los diferentes puestos de  mando de la ciudad informando a los oficiales soviéticos que se estaba realizando una retirada general. Como lo habían visto con su propio comandante visitándolos, y careciendo de comunicaciones para refutar o confirmar su declaración, los soviéticos comenzaron a evacuar Maikop. El Ejército Alemán entró en la ciudad sin pegar un solo tiro el 9 de agosto de 1942.


En 1942 la unidad madre fue aumentada hasta las dimensiones de una división, y entre los elementos añadidos había un destacamento de incursión costera (Kuestenjaegerabteilung) formado con voluntarios de la Kriegsmarine que operó en la costa del Mar Negro y del Mar de Azov, y un batallón de voluntarios ucranianos. Sus destacamentos operaron nuevamente en los Balcanes a finales de 1943, donde se vieron envueltos en acciones contra los partisanos en Grecia y Yugoslavia y tuvieron una intervención destacada en la captura de las islas de Kos y Leros a los británicos. Elementos de la división tomaron parte en la ocupación de Budapest en marzo de 1944, y también, muy activamente, en la "Operación Rösselsprung", el intento de capturar a Tito en su cuartel general de Dvar. 



Durante la investigación del intento de asesinato de Hitler el 20 de julio de 1944 se reveló la implicación de varios miembros de la unidad. Habiendo perdido la confianza en esos comandos de élite, Hitler transfirió la responsabilidad de las operaciones especiales, que siempre habían quedado en manos de los "brandenburgers", a unidades de comandos de las SS bajo el mando del SS-Obersturmbannführer Otto Skorzeny. Aunque muchos decidieron ingresar en los comandos de Skorzeny, otros permanecieron en la División "Branderburg", que en octubre de 1944 fue convertida en una Panzergrenadier-Division ordinaria, y quedó lista para entrar en acción en su nueva función en diciembre de 1944. Tras entrar en combate en el Frente Oriental, que se desmoronaba rápidamente, sus efectivos fueron cayendo de manera continua y la guerra acabó para la división en Moravia. Muchos de sus supervivientes fueron hechos prisioneros por el Ejército Rojo o murieron a manos de checos ávidos de venganza; pero algunos, recurriendo a su antigua habilidad para las operaciones especiales, consiguieron escapar al oeste haciéndose pasar por refugiados.


Algunos terminaron prestando sus servicios en otros países. Los servicios de información de las potencias vencedoras estaban dispuestos a emplear a los "brandenburgers" que estuvieran dispuestos a adoctrinarse. Estadounidenses y rusos emplearon sin duda a algunos de ellos. Los nuevos estados africanos se sirvieron para los sucesivos golpes de estado de muchos profesionales de la unidad. El jefe de los servicios de seguridad del presidente de Indonesia, Achmed Sukarno, era un "brandenburger". Mao Tse-tung y el separatista congoleño Tshombé fueron asesorados por "brandenburgers" y muchos otros terminaron en Egipto luchando contra los judíos.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Los “comandos” alemanes, creados por el enigmático almirante Canaris. La verdad es que siempre me apreció curioso, que siendo Hitler el primero en usarlos en Bélgica, Yugoslavia o la URSS, como bien nos indicas, que diera la orden de asesinar a los comandos británicos que Churchill. Debería haberse sentido honrado de que copiaran sus iniciativas.

http://librosenguerra.blogspot.com.es/

charlie furilo dijo...

@Llorenç: jejejeje, tratándose de Hitler, tampoco sorprende mucho, la verdad. La lógica y la coherencia me temo que no era lo suyo: un ejemplo: pasarse por el forro el rollo de la pureza racial y la supremacía aria cuando necesitó reclutar miles de eslavos, bálticos, indios, asiáticos y gente de todo pelaje para la Wehrmatch y las Waffen-SS.

Saludos!!

Anónimo dijo...

De hecho la última división de SS que defendió Berlín era la Nordland, formada por extranjeros:Ingleses, Daneses, Franceses y otros. Un total de 4.000 hombres contra la marea roja y que no podían volver a sus países de orígen.

Eoin